viernes, 23 de agosto de 2013

CONSTRUIR O RECONSTRUIR PARA DECONSTRUIR

ELCIBERECO
Buenaventura 22.08.2013

NOTA EDITORIAL

CONSTRUIR O RECONSTRUIR PARA DECONSTRUIR

Después de algún tiempo el desastre natural pasa a la historia, se olvida todo y la única preocupación es solo por reconstruir o recuperar lo destruido
Por: René Orozco Echeverry

 
 
El “Triangulo”,  figura  sagrada,  por  donde  se  asoma  el ojo de Dios.  Después de algún tiempo, el desastre natural pasa a la historia. Los  terremotos son  cíclicos  y se presentan con cierta recurrencia. Fórmulas para que las edificaciones resistan los enviones naturales. "Su que hacer profesional” apegado a códigos obsoletos. El adosamiento de edificaciones benefician la destrucción.
Haití, el 12 de enero a las 16:53:09, Chile, a las 03:34:17 el 27 de febrero, Turquía, el 8 de marzo a las 05:50 y San francisco, 8 de marzo a las 05:50, estos son los terremotos que hasta ahora se han presentado en el año que cursa, que aparte de producir devastación y destrucción, han cobrado centenares de víctimas humanas, sin que estemos seguros que vuelva a temblar y con que intensidad, duración e inclemencia pueda presentarse. Los terremotos que se han presentado en estos sitios, con intensidades que varían entre 4 y 9 grados en la escala Richter, con características catastróficas, replican con pasmosa regularidad y una vez cesa la acción destructiva, viene la ruina y el asolamiento que tardará muchos años en recuperarse la economía y los daños materiales.

Después de algún tiempo el desastre natural pasa a la historia, se olvida todo y la única preocupación es solo por reconstruir o recuperar lo destruido; nunca pensamos, paradójicamente, que estamos reparando o reconstruyendo para que las fuerzas sísmicas regresen con su implacable acción destructora.

Los sismos son cíclicos y se presentan con cierta recurrencia y periodicidad, así lo revela la historia, y lo peor, que nos hemos venido acostumbrado asombrosamente, sin que se vislumbre una solución que permita que las edificaciones resistan los enviones de la naturaleza.

No niego mi propia complicidad como arquitecto que soy, y que hemos sido negligentes e indiferentes ante esta dolorosa realidad con un alto grado de irresponsabilidad, bien por desconocimiento o desidia le entregamos nuestro “que hacer profesional” y confiamos a ingenieros civiles y sean quienes planteen el Sistema Estructural a un Proyecto arquitectónico apoyados en códigos obsoletos que poco han evolucionado y conservan postulados que fueron formulados desde su advenimiento - primera mitad del siglo pasado - cuando al uso empírico le aplicaron formulas y Ecuaciones Isostáticas, que poco han aportado a la Arquitectura Resistente a Terremotos de hoy, a la propia ingeniería y a la modernidad. La estabilidad de una edificación, como la “solución formal”, debe ser la respuesta de la creación arquitectónica que responda, contemple y vaya acompañada de un sistema estructural que garantice la permanencia de la edificación.

Si abandonamos la secular e inveterada manera de construir, con base en figuras geométricas deformables tales como: el cuadrado, el rectángulo y el circulo, dándole preponderancia al uso de triangulaciones espaciales, obtendríamos una arquitectura o volúmenes indeformables. ¿ Será que mediante la “forma” se puede evitar la destrucción masiva de las edificaciones ?, posiblemente si, por algo los egipcios, griegos, como romanos, consideraban el “Triangulo” la figura sagrada, por donde se asoma el ojo de Dios.

Fuera de las consideraciones anteriores, el “adosamiento” de las edificaciones en la ciudad intermedia o en las grandes ciudades, benefician la destrucción por cuanto adosarlas, restringe el movimiento e imposibilita que la energía sísmica se disipe.

En lo que estamos seguros, es que es susceptible que un nuevo movimiento telúrico ocurra, dónde y cuando no lo sabemos ni se puede vaticinar; lo que si es válido, es que se puede evitar la destrucción catastrófica si la estructura la diseñan los arquitectos que no se dejen seducir por las formas de construir de hoy, donde no tiene sentido CONSTRUIR y RECONSTRUIR para “DECONSTRUIR” ó HACER PARA DESHACER.
 

rene.orozco.echeverry@hotmail.com

 
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