domingo, 29 de septiembre de 2013

“Se construyó un proyecto político-paramilitar para tomar el poder”

 “Se construyó un proyecto político-paramilitar para tomar el poder”
    
Tomás Aguirre | @TomAguirreP | Fuente: Confidencial Colombia    
29 September 2013 10:35    
 

La periodista que desenmascara el paramilitarismo de la familia Uribe:

 
Olga Behar ha investigado desde la primera década del siglo XXI el fenómeno del paramilitarismo en Colombia. (Foto: Confidencial Colombia)

Olga Behar ha investigado desde la primera década del siglo XXI el fenómeno del paramilitarismo en Colombia.
 
 Foto: Confidencial Colombia
 
Durante la última semana, Santiago Uribe Vélez, hermano del expresidente Álvaro Uribe Vélez, fue citado por un fiscal de la Unidad de Derechos Humanos dentro de un proceso por la supuesta creación de grupos paramilitares.
 
La periodista colombiana Olga Behar conversó con Confidencial Colombia para contar el desarrollo de un libro que publicó hace algunos años en el que, con el testimonio del mayor retirado de la Policía Juan Carlos Meneses, reconstruyó la posible conformación del grupo paramilitar 'Los 12 Apóstoles' en cabeza del hermano del actual candidato al Senado.
 
Confidencial Colombia: ¿Cuál fue su primera impresión respecto al llamado a indagatoria por parte de la Fiscalía a Santiago Uribe?
 
Olga Behar: Siempre uno como periodista trata de llegar hasta el fondo en las informaciones que investiga, pero en el corazón, como colombiana, quisiera estar equivocada.
 
Por eso mi primera impresión es de mucha tristeza y mucho dolor al saber que la Fiscalía tiene ya en este momento indicios suficientes para plantear un llamamiento a indagatoria, lo que significa que se le va a interrogar concretamente sobre hechos que presuntamente se le van a imputar.
 
Eso duele como colombiana, al mismo tiempo confirma que el periodismo investigativo puede ser blindado de argumentaciones que pudieran servir para plantear que uno no dijo la verdad y eso también es satisfactorio desde el punto de vista profesional.
 
C.C.: Respecto al periodismo investigativo ¿Qué fue lo que la llevó a empezar a investigar este caso?
 
O.B.: Realmente, durante los años noventa no produje ninguna investigación seria sobre el tema de paramilitarismo porque la mayoría de los colombianos no habíamos hecho una lectura profunda sobre cuál era significado político, ideológico y económico del paramilitarismo.
 
Muchos nos creímos el ‘cuento’ de que los paramilitares se habían creado como un mecanismo de resistencia y de defensa frente a la agresión guerrillera, sin llegar al fondo y entender que este fenómeno fue un proyecto de toma del poder.
 
Por eso, más o menos a mediados de la primera década del siglo XXI, empecé a estudiar y entender este fenómeno.
 
 En ese momento aparece el caso de Meneses y me parece, desde el punto de visita de la investigación, muy atractivo para poder tratar de explicarme a mí misma y al público colombiano cómo se tejieron estas alianzas entre el poder político y económico con el paramilitarismo y realmente a través de mis investigaciones y del libro de El Clan de los Doce Apóstoles, logré corroborar que realmente sí se construyó ese proyecto político-paramilitar para la toma del poder.
 
C.C.: ¿Cómo llegó a la investigación el nombre del mayor retirado de la Policía Juan Carlos Meneses?
 
O.B.: Las investigaciones periodísticas casi siempre surgen de una entrevista, de una información que sale de un medio y esta no fue la excepción.
 
En mí nació ese gran interés por explorar este mundo perverso que se desarrolló en Antioquia a partir de una entrevista que Meneses concedió a un noticiero de la televisión colombiana, específicamente a Noticias Uno, a la periodista Patricia Uribe.

Cuando yo vi por televisión a Meneses y escuché esa voz me impresionó mucho. Durante varias semanas lo analicé. Pero por casualidades de la vida fue él el que me buscó a mí.
 
Precisamente porque sintió que a pesar de haber salido en los medios de comunicación, en algunos medios no en la mayoría, como que las palabras se las llevó el viento y él necesitaba exponer lo que había vivido de una manera más perdurable. Entonces se le ocurrió que podría ser a través de un libro pero él no era la persona capacitada para escribirlo.
 
Aquí es donde me contactó para saber si yo quería escuchar su historia. Fue una cosa de casualidad de cómo se forjan las historias, terminándonos de buscar el uno al otro y así fue como comenzó esto.
 
C.C.: Volviendo a la actualidad política del país ¿Cómo puede repercutir esta llamada a indagatoria de Santiago Uribe en la carrera para el Senado del expresidente y su nuevo movimiento político?
 
O.B.: Creo que dependerá, en buena parte, de cuál es el curso que tome esta investigación de la Fiscalía.
 
Pienso que a diferencia de otros procesos en los cuales se llaman a las personas a versión libre, a este señor lo han citado directamente ya a indagatoria, lo que quiere decir que hay un acervo probatorio que tiene el fiscal de Derechos Humanos como producto de su propia investigación.

Me parece que dependerá, como digo anteriormente, del curso que tome el futuro de Santiago Uribe. Indudablemente el golpe va ser durísimo, tanto desde el punto de vista emocional como desde el jurídico.
 
Si terminan incriminado al hermano del expresidente y lo ponen en prisión. Este es para mí el primer escenario, esto va para allá, es la impresión que yo tengo.

Donde esto llegue a suceder, Álvaro Uribe va ser ‘minado’ emocionalmente, sobre todo porque él es una persona muy visceral, y eso puede tener efectos hasta peligrosos diría yo, pero eso es mi concepción personal.
 
Desde el punto de vista jurídico también puede tener una implicación. Las mismas versiones y las mismas pruebas que indican que Santiago Uribe podría estar involucrado en todo este asunto del paramilitarismo en Antioquia dicen, esas mismas voces, que Álvaro Uribe fue como el auspiciador, el que estaba por detrás de su hermano y que era el poder detrás del trono, el verdadero poder.
 
Me imagino entonces que esto terminara en una compulsa de copias, pero no ante la Comisión de Acusaciones de la Cámara, porque estos hechos sucedieron entre los años 93 y 97 cuando el expresidente  era primero un político, luego candidato a la Gobernación y durante dos años gobernador de Antioquia, entonces esto terminaría en un caso en la Fiscalía indudablemente.
 
No sé hasta qué punto podamos hablar de los tiempos, ya que la justicia muchas veces es muy lenta, así que esto puede durar dos o tres años más y no afectar coyunturalmente la próxima elección al Congreso.
 
C.C.: ¿Cómo ha sido el día a día luego de revelar en El Clan de los Doce Apóstoles estas investigaciones tan fuertes?
 
O.B.: Fundamentalmente ha sido un enfrentamiento personal  a una situación en la que he tenido que domar lo que son los miedos. Mucha gente me dice “esa es gente peligrosa, usted cómo hace para investigar y meterse con esa gente”.
 
 Hasta ahora realmente no ha pasado nada que pueda yo decir que comprometa mi seguridad. Por supuesto he tomado medidas: la primera fue una familiar, que mis hijos se fuera a vivir lo más lejos que yo pudiera y viven en Asia, no viven tampoco tan a la mano.
 
Eso me da una garantía de que por lo menos ellos están a salvo, tienen protección de un gobierno extranjero, así que por ese lado, el 80 por ciento de mi tranquilidad está garantizada.
 
Luego el señor Santiago Uribe Vélez me demandó, me puso un denuncio penal por calumnia e injuria.
 
No sabemos exactamente en qué consiste el proceso, si es injuria agravada, sabemos que es calumnia indirecta, lo que quiere decir que me denuncia a mí por publicar algo que dijo otra persona. Ese proceso no ha comenzado, está todavía en la etapa de averiguación y me parece que no tiene mucho futuro mientras la justicia no decida si el señor es responsable o no, porque en buena parte, si lo calumnié o no, indirectamente depende de si Santiago Uribe es responsable o no.
 
 Elcibereco/René Orozco Echeverry/Editor/Redactor