domingo, 26 de enero de 2014

¡Ojalá quiten hasta el último ladrillo del Space!


El pleito legal con los Cantor es el más complejo que ha tenido que afrontar la constructora.
 
¡Ojalá quiten hasta el último ladrillo del Space!
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'Ojalá quiten hasta el último ladrillo del Space'

                                                      

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La familia del estudiante Juan Esteban Cantor exige un castigo ejemplarizante para constructores.

No le fue fácil regresar. Ahí, en el conjunto Space, reposan los recuerdos más especiales de su vida.

Tardes enteras de risas con Juan Esteban, su hermano, estudiante de comunicación social y el único residente que murió en la tragedia del pasado 12 de octubre.

Ángela Cantor mira con nostalgia hacia la estructura, custodiada por dos vigilantes.

En un mes y medio no habrá nada allí y con las remembranzas quedarán sepultados los enseres que con esfuerzo tenían en el apartamento 213 de la torre tres.

Debido a la magnitud de esa tragedia, de la que aún se muestra visiblemente consternado, el alcalde de Medellín, Aníbal Gaviria, ordenó hace seis días la demolición de lo que queda de ese conjunto residencial en el exclusivo barrio El poblado.

Esa determinación estuvo soportada por las conclusiones de la primera fase de la investigación de la Universidad de los Andes.

Ya las autoridades locales habían ordenado la implosión de la torre cinco. “Su demolición será la primera semana de febrero próximo”, anunció Gaviria, en tanto aclaró que después vendrá el derribamiento de las restantes, una fecha que podría ser a mediados de marzo.

Esa determinación dejó más tranquila a Ángela. No obstante, cree que solo es un primer paso y que todo terminará cuando los responsables sean castigados.

“Ojalá quiten hasta el último ladrillo, porque esto representa una cicatriz y es el monumento a la negligencia y la corrupción”, afirma.

Sin respuestas

El pleito legal con los Cantor es el más complejo que ha tenido que afrontar la constructora Lérida CDO con las víctimas y damnificados del conjunto residencial.

Con los familiares de obreros, ingenieros y vigilantes que la noche del desplome laboraban en el edificio ya han tenido acuerdos o están en fase de arreglos. Pero con la familia de Juan Esteban la conciliación aún está lejana.

“No hemos tenido ningún acercamiento con la constructora para resarcirnos la pérdida de mi hermano”, comentó Ángela, con la voz entrecortada y aún con lágrimas.

Añade que la muerte de Juan Esteban no se dio por imprudencia, como lo han sugerido algunos, y recordó que la noche del desplome del edificio su hermano ingresó al parqueadero de esa torre porque no había restricción para no hacerlo.

“Entró por unos paquetes. Saludó a Luis, el portero, y le pidió que dejara ingresar a un amigo suyo que llegaba en otro carro. Solo encontraron parqueadero para los dos vehículos en la torre seis. No había ni una cinta que prohibiera el paso”, enfatizó Ángela.

EL TIEMPO contactó a la constructora Lérida CDO, para que explicaran la situación, pero adujeron que por el momento no había declaraciones públicas. Así mismo, el curador Carlos Ruiz, implicado en el caso y en el ojo del huracán luego de que el informe de Uniandes estableciera la omisión de normas, tampoco quiso responder a este diario.

Los curadores en la mira

Tras la exposición del primer informe de la Universidad de los Andes sobre las causas del desplome de la torre 6 del proyecto Space, en Medellín, y que recomendó derribar las cinco torres restantes por el peligro que representan, los curadores están nuevamente en el ‘ojo del huracán’.

El anuncio del nuevo ministro de Vivienda, Luis Felipe Henao, de solicitar a la Procuraduría que “inicie las indagaciones respectivas para establecer si existe alguna responsabilidad disciplinaria del curador que entregó la licencia de construcción”, disparó de nuevo las críticas sobre la labor de estos funcionarios.

Ernesto Jorge Clavijo, presidente del Colegio Nacional de Curadores (CNCU), considera que con esto se “quiere pescar en río revuelto” y advierte que el gremio está esperando, “desde hace 17 años, que la Comisión Asesora Permanente para el Régimen de Construcciones Sismo Resistentes reglamente los procedimientos para la revisión de los diseños y, por otra parte, los requisitos de quienes los hacen, algo que data de la Ley 400 de 1997”.

“Nuestra labor –agrega– es aprobar los planos de los proyectos arquitectónicos y estructurales, y los estudios técnicos presentados por los interesados, los cuales deben ser elaborados por profesionales facultados que suscriben los soportes técnicos presentados y son responsables de los mismos”.

 Una de las conclusiones del informe es que “el proyecto del edificio Space no cumple con los requisitos básicos de la Norma Sismo Resistente (NSR-98) en los títulos A, B, C y D, y por lo tanto presenta una serie de deficiencias de tipo estructural…”.

Tanto Sandra Forero, presidenta de la Cámara Colombiana de la Construcción, como Federico Estrada, presidente de la Lonja de Propiedad Raíz de Medellín, comparten la idea de que la clave para evitar nuevas tragedias como la del Space está en que la supervisión de las obras esté a cargo de un tercero diferente de la constructora.

El Ministro anunció a finales del 2013 la creación de una Superintendencia Delegada para el Consumidor de Edificaciones, más exigencia en la supervisión de los proyectos de vivienda y un concurso nacional para seleccionar esos supervisores, acciones que deben estar listas al finalizar el primer semestre de este año.

 
VÍCTOR ANDRÉS ÁLVAREZ C.
GABRIEL FLÓREZ
REDACTORES DE EL TIEMPO