sábado, 7 de marzo de 2015

Gobierno 'maquilla' cifras de violencia : José Vivanco, director de HRW 1 Comenterio del arq. René Orozco Echeverry

    JudicialELCIBERECOVIRTUAL
    Buenaventura, Col.
    Sábado marzo 7 de2015
     
    Falsos positivos ? 
    Gobierno 'maquilla' cifras de violencia en Buenaventura: José Vivanco, director de HRW
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Mindefensa defiende la tarea adelantada en esa ciudad. Human Rights Watch asegura que el Gobierno no ha logrado detener los abusos de organizaciones criminales. Polémica.
 
Por: Redacción El País
  
 
 
 

Dato clave

El balance de las autoridades

”La sensible reducción se debe a los esfuerzos de esa institución en Buenaventura. Por ejemplo, en febrero de 2014, por orden del ministro Juan Carlos Pinzón, la Fuerza Pública comenzó una intervención con grupos especiales y el apoyo de la Fiscalía General de la Nación, para reducir los índices de criminalidad, generados en buena parte por la banda delincuencial ‘La Empresa’ y la atomización del llamado ‘clan Úsuga’”, dijo el Ministerio.
Y agregó que en 2014 se realizaron 1.492 capturas por todos los delitos. “En 2015 ya van 31 capturas a criminales de estas estructuras”.

 
Gobierno 'maquilla' cifras de violencia en Buenaventura: José Vivanco, director de HRW
Un grupo especial del CTI de la Fiscalía ha sido destinado para investigar las fosas halladas en el barrio El Progreso de Buenaventura. Los habitantes dicen que la zona se ha convertido en un “cementerio clandestino”.
El País.com.co

















 
 
 
 
 
El informe sobre la violencia en Buenaventura, presentado el miércoles por Human Rights Watch,generó una polémica con el Gobierno que emitió un comunicado desmintiendo a la organización internacional.
Mientras HRW aseguró que “el Gobierno no ha logrado detener los abusos de organizaciones criminales” que continúan cometiendo “secuestros, desapariciones y desmembramientos de habitantes de Buenaventura”, el Ministerio de Defensa emitió un comunicado diciendo que la ciudad “es hoy más segura gracias a la Fuerza Pública”.
Según el Ministerio, “entre el 1 de enero y el 2 de marzo de este año en Buenaventura se han presentado 11 casos de homicidio, 77 % menos que ese mismo lapso de 2014, cuando se registraron 48. Las cifras son de la Policía, que además dan cuenta de que este año en ese puerto no se han presentado casos de homicidio en la modalidad de desmembramiento, cuando en 2014, en cuatro hechos de este tipo, seis personas murieron”.
José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW, expresó que “es lamentable que el Ministerio de Defensa intente maquillar las cifras y minimizar el fenómeno de los descuartizamientos en Buenaventura. En un comunicado afirma que solo seis personas fueron desmembradas en 2014. Sin embargo, según la información obtenida por Human Rights Watch del Instituto de Medicina Legal, órgano competente para practicar autopsias en el país, desde que el Gobierno anunció la intervención en Buenaventura en marzo del año pasado, se han encontrado los restos desmembrados de al menos 16 personas, de las cuales 15 habrían sido asesinadas y descuartizadas en 2014”.
“En todo caso, aún si fueran solo 6 personas desmembradas en Buenaventura, no es un ejemplo de éxito de la Fuerza Pública en esa ciudad, sino evidencia de una realidad que avergüenza por su inhumanidad y que el estado tiene la obligación de erradicar por completo”, agregó.
Los desmembrados
La Fiscalía reveló que en el 2014, entre enero y junio, fueron encontrados en la bahía de Buenaventura 31 partes que corresponden a 14 personas.
Entre julio y octubre no se presentó ningún caso. Y en noviembre pasado, las llamadas ‘casas de pique’ ycementerios clandestinos se trasladaron a la Comuna 12 (en la entrada del Puerto). En noviembre hallaron en una fosa los cuerpos de dos personas en el barrio Antonio Nariño.
Se trataba de dos hombres, provenientes del norte del Valle, quienes fueron asesinados en junio del año pasado.
Y en diciembre la Fiscalía realizó varias exhumaciones en esta comuna. El cuerpo desmembrado de Jhon Eder Cerón fue hallado en una fosa cerca al aeropuerto. Entre enero y febrero pasado se encontraron nuevos restos. Según la Fiscalía, en 33 días de este año se han hallado once partes de cuerpos en fosas del barrio El Progreso.
De estos restos han sido identificados Jhonatan Suárez y Leonardo Fabio Casierra, dos obreros desaparecidos en El Progreso el 21 de diciembre de 2014.
Los otros restos, presumen las autoridades, son de casos de meses anteriores, ya que estaban esqueléticos, por lo que la Fiscalía aseguró que en el 2015 no han conocido desmembramientos.

Reacciones

El defensor regional del Pueblo, Carlos Hernán Rodríguez, aseguró que el informe de HRW coincide con los llamados de atención hechos por la Defensoría de la situación de Buenaventura.
“Aunque hemos reconocido los avances por los esfuerzos de las autoridades, la situación sigue siendo preocupante y la práctica de los desmembramientos como eje de control sigue presentándose, lo mismo que los casos de violencia sexual, desplazamientos y desapariciones. La gente sigue teniendo miedo y el hecho de que tres de los desmembramientos se haya probado que ocurrieron en diciembre es muy grave”, agregó.
Por su parte, Bibiana Peñaranda, de la fundación Akina, expresó que la violencia sigue presente en Buenaventura. “Puede que los medios ya no hagan el mismo despliegue, pero es que la violencia no solo se refleja en las ‘casas de pique’, la violencia sexual contra las mujeres sigue sucediendo. Eso no se puede negar”.

Los esfuerzos

“La Fiscalía ha adoptado múltiples medidas para poner fin a la impunidad en Buenaventura, como asignar ocho fiscales nuevos (...) Esto ha permitido avances importantes, como detenciones en relación con dos casos de desmembramientos cometidos en abril de 2014, y el descubrimiento de múltiples fosas clandestinas desde noviembre. No obstante, únicamente una fiscal de los 23 que están en Buenaventura está dedicada exclusivamente a la investigación de desapariciones.
Tiene a su cargo más de 400 casos de este tipo, algunos incluso que ocurrieron desde hace más de una década”, indica el informe.

Falta presencia policial

“En febrero y marzo de 2014, el gobierno envió a cientos de policías e infantes de marina adicionales a Buenaventura. Human Rights Watch pidió información para verificar si el gobierno ha mantenido la mayor presencia de miembros de la Fuerza Pública en el lugar, pero estos datos no han sido proporcionados por las autoridades (...) Los residentes de algunas áreas indican que la Policía no tiene presencia permanente en sus barrios y que sólo patrulla la zona esporádicamente, con lo cual quedan expuestos al accionar de grupos sucesores del paramilitarismo”, agregó HRW.

Violencia Sexual

El informe revela que “existen evidencias contundentes de que grupos sucesores del paramilitarismo están perpetrando actos de violencia sexual en Buenaventura. La Unidad de Víctimas registró 30 casos de violencia y abuso sexual entre abril y septiembre. Trece de las víctimas identificaron a miembros de grupos sucesores del paramilitarismo como los agresores (...) Residentes de varias zonas de la ciudad dijeron a Human Rights Watch que los grupos violan a mujeres y niñas en sus barrios. Una mujer afirmó que, tarde una noche, en una fecha próxima a fin de año, presenció el momento en que miembros de un grupo violaban a una mujer en un descampado cerca de su vivienda”.
“Numerosas mujeres y niñas también son objeto de acoso sexual, amenazas de violencia sexual y presiones por parte de miembros de grupos sucesores del paramilitarismo para que sean sus novias”, agregó el informe.

Reclutamiento de niños

“Buenaventura presenta uno de los índices más elevados de reclutamiento de niños por grupos armados en toda Colombia, según informa la Defensoría del Pueblo.
Residentes y líderes comunitarios en distintos lugares de la ciudad dijeron a Human Rights Watch que numerosos niños, incluso de apenas 10 años, son vinculados a grupos sucesores del paramilitarismo que tienen presencia en sus barrios”, señala el informe.
“A menudo los niños hacen de informantes y centinelas, pero también han participado en asesinatos y otros graves abusos de estos grupos”, se agregó.
La Fiscalía había asegurado que 18 personas han sido capturados por cuatro casos de desmembramiento. La mitad de los detenidos (9) eran menores de edad.
 
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A ADIÓS LO QUE ES DE DIOS, AL CESAR LO QUE ES DEL CESAR.
 
José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW, expresó que “es lamentable que el Ministerio de Defensa intente maquillar las cifras y minimizar el fenómeno de los descuartizamientos en Buenaventura. Sin embargo, según la información obtenida por Human Rights Watch del Instituto de Medicina Legal, desde que el Gobierno anunció la intervención en Buenaventura año pasado, se han encontrado los restos desmembrados de 16 personas, de las cuales 15 habrían sido asesinadas y descuartizadas…”
 
Las seculares calamidades que viene padeciendo Buenaventura no se resuelven por si solas y las medidas para solucionarlas provenientes del Gobierno Nacional no han servido para que la ciudad haga trance a la tranquilidad, a la paz y retorne a la normalidad, o que a esta no se llega por Generación Espontánea, creerlo resulta ilusorio, tanto como que las “gentes” dejaran de odiarse y matarse, o negando la realidad de lo que acontece o sin escrúpulo alguno, el Gobierno Nacional se empeñe en negarlo recurriendo a falsas estadísticas para mostrar que en Buenaventura su tarea ha sido eficaz; con este tipo de informes lo que se logra y hace que las criminalidad se multiplique y como “mecanismo de defensa”, la delincuencia obtén por nuevas formas criminales, mientras la comunidad incólume soporta los enviones, de los asesinos y continúen los descuartizamientos, y que aparezcan cuerpos desmembrados enterrados en fosas comunes.
Quienes administran sus destinos, no tiene fórmulas que garanticen la seguridad del “Puerto”, que es a lo se debe dar mayor importancia por encima de cualquier otra pretensión, y darle preferencia, a acciones encaminada a que la ciudad salga del desasosiego y la incertidumbre en que vive; puesto que las medidas coadyuvantes y provenientes del Estado, aun no muestran resultados esperados y efectivos.
La administración Distrital año tras año viene perdiendo credulidad, soberanía y autonomía, en virtud que el Alcalde se ha convertido en un complaciente vergonzoso súbdito del “Centralismo”, y un acucioso “paje” del Paternalismo, sumisión que en nada beneficia a a sus habitantes porque se pierde la autoridad y la independientes y por ende que sus gobernantes pierdan autonomía y sean gestores de su propio desarrollo el que solo se podrá conseguir si se solo dispone de plena y absoluta libertad que conjugado con el esfuerzo colectivo y tolerancia ciudadana, nos estaremos acercando a la tan ansiada “paz”, que en pocas décadas se perdió y sus gentes en gran medida, se fueron convirtiendo en asesinos desalmados y sin escrúpulos, porque no se ha implementado política alguna, seria y acertada para contrarrestar tanta violencia, cuyas causas, son de conocimiento público, tan simples y claras, que con un solo ojo basta para verlas, dónde proviene, su origen y qué la ocasiona.
Ante la indiferencia del BARTOLO VALENCIA Alcalde del “Distrital Especial”, sumado a que de nada han valido las Promesas y los tantos Ofrecimientos del Presidente JUAN MANUEL SANTOS, llevó a que La Diócesis de Buenaventura y la Cámara de Comercio, salidas de ropas, ondearan las banderas de la protesta popular, mensajes que la delincuencia parece no haber entendido y la apatía e indiferencia con que la Municipalidad recibió del “plantón”, que fue considerada por el “burgomaestre” como un intromisión en sus gestión, cuando el acto que adelantaron las dos entidades tenía como fin supremo coadyuvar para cese la intolerancia, los asesinatos que siembran el desconcierto ciudadano.
En mis reflexiones intimas, he consideran que con “PLANTÓN” es como se resuelve los problemas de Buenaventura, que las tomo como acciones públicas coyunturales, sin que sean las medidas verdaderamente adecuadas y efectiva.
Pienso que esta tarea es más “científica que política” la que consiguientemente debe encomendarse a EXPERTOS, ANTROPÓLOGOS, SOCIÓLOGOS, PSICÓLOGOS, Y PEDAGOGOS O A UN GRUPO DE CIENTÍFICOS ANALISTAS ETC , y no a técnicos, ni de competencia de las Fuerzas del Orden; cualquier otra forma con que se pretenda tratarla, resulta inocua, fallida e inútil, con el riesgo de que se incremente la confusión y a que los insurgentes se ingenien nuevas formas delincuenciales y se frustre la esperanza de sus habitantes que permanecen y viven en total desprotección.
Monseñor Héctor Epalza Quintero obispo de Buenaventura, hace lo que puede, su ayuda es valiosa y útil; mientras que BARTOLO VALENCIA nó, porque él está en otro cuento, empeñado en proponer Obras Faraónicas, dejando de la lado la seguridad y la vida; administrando el Distrito con un PLAN DE GOBIERNO obsoleto, en el que no contempla como contrarrestar la delincuencia común, el narco tráfico, la insurgencia y la corrupción pululante focalizada en el propio Distrito, “PLAN DE ORDENAMIENTO TERRITORIAL”, que no está hecho para los tiempos actuales, y no considera el Estado de Guerra que hoy vive la ciudad, el que se ha generalizada por todos los barrios de la ciudad.
El alcalde endosó al Gobierno Nacional la seguridad de los ciudadanos quien ha responde enviando tropas para que se enfrente con un enemigo que nadie sabe en definitivas quien es, desconocido e impreciso, que tampoco se sabe dónde está, ni que inspira su rebeldía, y es poco lo que se puede hacer y no es el “obispo” el llamado a enfrentar la grave situación de Orden Público y además, no es asunto de su incumbencia ni puede subsanar la crisis que atraviesa Buenaventura, la que se deriva en gran medida al desenfoque y el desgreño de cómo Bartolo Valencia Ramos viene administrando el municipio, quien además no estaba capacitado para ser el administrador y que esperaba la comunidad, que es precisamente una de las causas que genera y tiene origen en el desenfoque y desgreño de como se ha venido administrando el Distrito creyendo que los ingentes problemas que predominan y reinan en la ciudad y quienes lo acolitan, consideran que la solución salomónica es aplicando recursos en DESARROLLO FÍSICO y en “Obras” no contempladas en el PLAN DE ORDENAMIENTO TERRITORIAL del municipio: “Un Bulevar”, que no se requieren ni es el sitio adecuado para emplazarlo.
Mientras de la ministra de Educación Nacional de “marras”, aboga por la redención del Puerto, quien afirma que de la GRATUIDAD, se esfumaron cerca que 100 mil Millones destinados a la educación de los niños pobres y todo ha quedado en la impunidad.
No dejo de considerar que el alcalde actual, quien hizo parte y perteneció a todas las administraciones que antecedieron a la suya nunca se destacó como un funcionario de excepción y menos que hubiera propuesto cosas tan inverosímiles como hoy viene realizando, sin importándole un comino la situación sociales por las que atraviesa la municipalidad: el crimen que aflige y ronda, son razones y motivo suficientes para aplazar estas “utopías”, porqué el interés primordial del pueblo está por encima de cualquier otra circunstancia, es que le garanticen vida, la paz y el trabajo.
Bartolo Valencias Ramos tendrá que explicar a su debido momento, que lo ha llevado a tener tan notoria preferencia y qué lo induce a tener tanto empeño por este tipo de “ocurrencias”, por demás descabelladas, obsesiones que solo alimenta su ego, la insensatez emocional y sus propios intereses, lo que hace suponer que detrás de Bartolo, debe haber un equipo a quien lo induce dirigir su administración hacia campos que le son totalmente desconocido porque Bartolo no tiene capacidad de proponer cosas de estas naturaleza, puesto que si no fuera porque cuenta con estas ayudas, su labor seria doméstica y elemental, limitado a seguir “enrejando” el Separados Central de la Avenida Simón Bolívar y verlo osadamente tan empeñado hacer un extraño Bulevar, explica que hay alguien que le maneja los hilos, quienes lo han metido en un Proyecto utópicos, inverosímiles como innecesarios para la ciudad de Buenaventura.
El Obispo de Buenaventura pienso que no desconoce las barbaridades que adelanta el Distrito en el Centro de la ciudad que afectaron lares de la diócesis que sin formula de juicio presencio la destrucción del parque Gerardo Valencia Cano; que hoy evoco con nostalgia la desaparición de ese hermoso rincon, que siendo Edgar Villaquirán presidente del Club Rotario, me encomendó el diseño del pedestal donde fue colocada la escultura del “Obispo Rojo” patrimonio de todos los bonaerenses que parece importó poco y el alto jerarca de la iglesia no pudo evitar que inmisericordemente el parque fuera destruido por el Distrito en un afán inexplicable y demencial por arrasar y destruir los “símbolos histórico” de la ciudad, para emplazar en este sector, lo que ahí no tiene cabida.
rene.orozco.echeverry@hotmail.com